martes, 25 de enero de 2011

-Dios, amigo del hombre


Dios, amigo del hombre, amigo de la vida

Es bien conocido que la primera prioridad del Papa es abrir a los hombres de hoy el acceso a Dios. Misión nada fácil en estas nuestras sociedades europeas tan secularizadas.
Benedicto XVI nos ha dicho que “es una tragedia que en Europa, sobre todo en el siglo XIX, se afirmase y divulgase la convicción de que Dios es el antagonista del hombre y el enemigo de su libertad. Con esto se quería ensombrecer la verdadera fe bíblica en Dios”. Dios en realidad es el amigo de los hombres y el amigo de la vida y nos invita a ser sus amigos.
El Papa nos ha dicho en su viaje a España que “Dios es el origen de nuestro ser y cimiento y cúspide de nuestra libertad; no su oponente”. Y por ello no dudó en pedir, desde Santiago de Compostela, lugar tan significativo para el continente europeo, que “Europa ha de abrirse a Dios, salir a su encuentro sin miedo, trabajar con su gracia por aquella dignidad del hombre que habían descubierto las mejores tradiciones”.
Si el tema de Dios estaba en el centro de los mensajes del Papa, es muy lógico que quedara maravillado por la basílica de la Sagrada Familia. Lo expresó así:“En un humilde y gozoso acto de fe, se ha levantado una inmensa mole de materia, fruto de la naturaleza y de un inconmensurable esfuerzo de la inteligencia humana, constructora de esta obra de arte. Ella es un signo visible del Dios invisible”.
            En diferentes escritos el Papa ha expresado que la experiencia de la belleza es un camino hacia el misterio, y en último término, hacia Dios. Esto explica su fascinación por la obra de Gaudí hasta el punto de usar “El Nacimiento” de la nueva basílica como felicitación de esta Navidad. Gaudí, abriendo su espíritu a Dios, ha sido capaz de crear en esta ciudad de Barcelona un espacio de belleza, de fe y de esperanza que conduce al hombre al encuentro con quien es la Verdad y la Belleza misma.
(extracto de Palabra y Vida, 16/01/2011: Full Dominical de Barcelona)

-Juan Pablo II beatificado el 1 Mayo


La Beatificación de Juan Pablo II, será el 1 de mayo
El Papa más querido por la humanidad será el patrono de la Jornada Mundial de la Juventud de Madrid el próximo mes de agosto
La tan esperada beatificación de Juan Pablo II tendrá lugar en Roma el próximo primero de mayo, según anunció ayer el Vaticano poco después de que Benedicto XVI reconociese como milagro la curación instantánea del párkinson que sufría la religiosa francesa Marie Simon-Pierre. Casi simultáneamente, el cardenal presidente del Pontificio Consejo para los Laicos, anunciaba en Madrid ante 300 delegados de todo el mundo que Juan Pablo II será también, lógicamente, patrono de la Jornada Mundial de la Juventud del próximo mes de agosto.
Los restos mortales de Juan Pablo II serán trasladados a su nueva capilla en la basílica de San Pedro días antes de la beatificación ya que el flujo de peregrinos — ya más de veinte mil muchos días— colapsaría las Grutas Vaticanas. El ataúd no será abierto sino colocado directamente bajo el altar de la capilla de San Sebastián, contigua a la de «La Piedad».
Divina Misericordia
La fecha del primero de mayo no sólo es la fiesta del Trabajo y de San José Obrero sino que coincide este año con el Domingo de la Divina Misericordia, una festividad instituida por Juan Pablo II en el año 2000 poco después de canonizar a su promotora, la religiosa polaca Faustina Kowalska, fallecida en 1938, cuya tumba solía visitar Karol Wojtyla en su época de trabajador como ayudante del dinamitero en una cantera de Cracovia durante la ocupación nazi.
El portavoz del Vaticano, padre Federico Lombardi, afirmó que Karol Wojtyla es «un amigo y un intercesor que ayuda a acercarse a Dios», y será elevado a los altares no tanto por su extraordinaria actividad como Papa sino por «la fuente espiritual de esas obras extraordinarias, que era su fe, su esperanza y su caridad». En los procesos de beatificación o canonización de Papas, el Vaticano subraya siempre que se propone como ejemplo de santidad y se autoriza el culto a una persona por haber vivido las virtudes cristianas en grado heroico, no porque se apruebe cada una de sus decisiones mayores y menores como Pontífice, sujetas —como todo— al juicio de la historia.
El cardenal Ángelo Amato, prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, manifestó ayer que Juan Pablo II llegará a los altares en sólo seis años gracias a que el Papa Benedicto XVI dispensó del plazo de cinco años de espera desde el fallecimiento, pero no porque se haya saltado ninguna fase ni ningún trámite de un proceso normal. El cardenal subrayó que «precisamente para honrar dignamente la memoria de este gran Pontífice, la causa ha estado sometida a un análisis particularmente detallado».
Un detalle desconocido
Ángelo Amato reveló un detalle desconocido sobre el milagro. El 2 de junio del 2005, la religiosa francesa de 46 años aquejada de la enfermedad de Parkinson «cansada, y abrumada por los dolores, manifestó a su superiora la intención de ser dispensada del trabajo profesional» que habitualmente realizaba en la clínica de maternidad. La petición urgente a Juan Pablo II, y el milagro de la curación repentina y total, obtenida aquella misma noche, se sitúan también en el terreno del trabajo profesional: un Papa que fue obrero en su juventud obtiene la curación de una religiosa que ha podido así continuar su trabajo en una clínica de maternidad ayudando a mujeres en uno de los momentos más bonitos de la vida.

- La alegria de Benedicto XVI por Juan Pablo II


El Papa expresó su alegría por beatificación de Juan Pablo II
El papa Benedicto XVI expresó hoy que todos los que conocieron o admiraron a Juan Pablo II seguramente comparten la alegría que él siente por la beatificación de su predecesor, que se realizará el 1 de mayo en una ceremonia a la que podrían acudir unas 2 millones de personas.
La beatificación es el último paso importante necesario para que un católico romano pueda ser considerado como un posible santo.
Se prevé que la ceremonia, a una semana del Domingo de Pascua, atraiga a una gran multitud, según autoridades romanas que se apresuraban para preparar a la capital para el acto.
Al funeral de Juan Pablo II en el Vaticano acudieron casi tres millones de fieles.
"El 1 de mayo tendré la gran alegría de proclamar bendito al venerable Juan Pablo II, mi querido predecesor", dijo Benedicto XVI, al hablar desde la ventana de su estudio con vista a la plaza de San Pedro, en la que turistas y peregrinos se congregaban para recibir su tradicional bendición del domingo.
"Todos los que lo conocieron, todos los que lo estimaron y admiraron, no pueden sino alegrarse junto con la Iglesia por este evento", dijo el pontífice.
Muchos peregrinos vendrán desde Polonia, país natal de Juan Pablo II. El Papa le dijo a los fieles polacos en la plaza que él comparte su alegría por la beatificación, anunciada el viernes.
"Esta noticia ha sido muy esperada por todo", especialmente por los polacos, porque Juan Pablo II había sido "su guía en la fe, la verdad y la libertad", dijo Benedicto XVI.
Se acredita al papado del primer pontífice polaco, que duró de 1978 a 2005, con haber ayudado a acabar con el control comunista en Europa oriental a finales de la década de 1980, en especial por su gran apoyo al movimiento laboral Solidaridad de Polonia.

-Demasiado silencio ante las agresiones


La indiferencia suicida
La Iglesia Católica presta a la sociedad un servicio sin parangón por su dimensión y naturaleza. Atiende a los más marginados, heridos y débiles. Sirve a los pobres, acoge a los inmigrantes, acompaña a los moribundos que los demás han abandonado. Siendo así no es extraño que un ateo, el doctor Jose Manuel López. especialista en oncología, diera cuenta en el Diario Montañés de las razones que le llevan a marcar la equis en la casilla de la Iglesia. Porque: (1) es la organización benéfica más eficiente; (2) es difícil entender a Europa y entendernos obviando el catolicismo; (3) está harto de la beligerancia contra la Iglesia en España.
Más allá de la beligerancia local, la Iglesia y por extensión los cristianos son perseguidos en muchos lugares del mundo. Masacres en Egipto, genocidio en Irak, criminalización en Pakistán, clandestinidad obligada en Arabia Saudí, mártires en Argelia, represión y expulsiones en Marruecos. En ningún estado islámico un cristiano puede vivir con normalidad su fe. Y eso es terrible; también para las sociedades musulmanas. El consejero religioso del Muftí de la República del Líbano, Muhammad Al-Sammak, es rotundo: “La emigración cristiana de Oriente Medio es una catástrofe para el Islam”. Los musulmanes no pueden ser cómplices con su silencio, de ahí que las comunidades islámicas de nuestro país estén obligadas a condenar alto y claro la persecución.
Ante esta dinámica malvada, nuestra indiferencia es suicida. El periodista Marçal Sintes lo definía con precisión: “Es alarmante y desolador contemplar como una sociedad hipersensible a mil causa, grandes y pequeñas, serias y estrafalarias, como la catalana, gira la espalda a la persecución de los cristianos”. ¿Dónde está la voz de Zapatero y su Alianza de Civilizaciones? ¿Por qué guarda silencio el Parlamento de Cataluña? Tan solo sea por egoísmo razonado: es previsor que los débiles se solidaricen con los perseguidos.
¡Entre nosotros todo es tan brutalmente irracional! La Comisión Europea ha editado tres millones de ejemplares de una agenda escolar en la que figuran festividades religiosas musulmanas, judías, hindúes, sikhs, pero ninguna cristiana, ni tan sólo la Navidad. En la Universidad de Barcelona, aerópago -se supone- de la libertad, la autoridad académica ha suspendido la misa de los miércoles en la capilla de económicas, porque dice que no puede garantizar la seguridad de los católicos. Si no sabemos defender los derechos fundamentales de todos en nuestra propia casa, no lo dude, estamos acabados.
Josep Miró i Ardèvol, Presidente de e-cristians.net/

-Los jóvenes crecen en mundo ateo


El desafío del cristianismo en España
Fernando Sebastián, arzobispo emérito de Pamplona y Tudela
España está a punto de romper la continuidad de su tradición espiritual cristiana y católica, para instalarse en un contexto cultural nuevo, ateo, materialista y nihilista. No es cuestión de promover la guerra entre creyentes y no creyentes, ni se trata de estimular la resistencia numantina. El Evangelio de Jesús es capaz de vivir en todas las situaciones imaginables y puede sobrevivir a todas las agresiones, y de vencer convenciendo a sus mismos agresores. El Evangelio de Jesús sigue siendo la única levadura capaz de transformar la masa inerte de nuestro viejo mundo egoísta y resignado a morir, la única luz capaz de iluminar nuestras tinieblas y alumbrarnos nuevos caminos de esperanza y de alegría.

No podemos decir ya que la sociedad española es una sociedad católica. Hay muchos bautizados que no piensan ni viven de acuerdo con su Bautismo. Otros muchos han abandonado explícitamente la fe bautismal. Otros rechazan elementos de la doctrina católica, ya sean dogmáticos o morales. En algunas ciudades, es frecuente encontrar familias que no bautizan a sus hijos... Está claro que no podremos cambiar las cosas de la noche a la mañana, pero, con la ayuda de Dios y nuestra colaboración entusiasta, sí podemos cambiar la tendencia y comenzar una nueva era que llegue a su esplendor cuando Dios quiera. La urgencia resulta más apremiante si tenemos en cuenta que lo que ahora ocurre en Occidente es muy probable que pase en pocos años a otros continentes menos afectados hoy por el secularismo. No nos engañemos, nadie se librará de pasar la crisis de la confrontación con la modernidad laicista.

No hemos logrado despertar en nuestras Iglesias un movimiento auténticamente evangelizador. Lo que sí se percibe es una reacción al proceso secularizador y descristianizador, de tipo restauracionista y formalista que, si en algunas cosas puede estar justificada, no coincide con lo que tiene que ser el núcleo ni la inspiración de una época evangelizadora, orientada a romper el cerco cultural del cristianismo y a abrir nuevos espacios a la fe. Restaurar los usos externos de los años pasados no es lo mismo que recuperar la fuerza espiritual y la eficacia transformadora de las convicciones religiosas de los primeros cristianos. Tengo la impresión de que no se quiere reconocer esta situación de descristianización generalizada. Es preciso fortalecer la fe de los cristianos. Tenemos que aprender a vivir todos como miembros de una Iglesia verdaderamente evangelizadora y misionera. No podemos aceptar como normal la situación actual en la que tantos cristianos desertan de la Iglesia, en la que las generaciones jóvenes crecen en un mundo prácticamente ateo, sin una relación vital con la persona de Jesucristo ni con el Dios de la salvación. Todos los demás problemas que podamos señalar, por importantes que nos parezcan, son secundarios en relación con esta tarea primordial de la evangelización. Tenemos que ver cómo podemos llevar el Evangelio de Jesús a los ateos, a los indiferentes, a los agnósticos, pero también a los protestantes, a los musulmanes, a los budistas, a los animistas que viven con nosotros.

La presentación del Evangelio de Jesús tiene que producir en los oyentes una verdadera crisis de conversión. Crisis que es juicio sobre la vida anterior, esa vida normal que malgastamos dejándonos absorber y dominar por las cosas y los afanes de este mundo. Son pocas las actividades pastorales que buscan realmente esta conversión. Nos olvidamos de que la vida cristiana comienza con la conversión personal, o bien damos por supuesto que esta conversión quedó hecha anteriormente. 
Tenemos que comenzar de nuevo

jueves, 20 de enero de 2011

-El Papa contesta a los jóvenes


-Los jóvenes preguntan al Papa
 Los jóvenes de Malta preguntan: «Santo Padre, ¿qué debemos hacer?»: con esta pregunta varios jóvenes, participantes en el Encuentro de la Juventud con el Papa en Malta, plantearon al Santo Padre sus inquietudes y esperanzas; también sus dudas, temores –mencionaron la dificultad de la crisis por los abusos- y experiencias personales de rechazo o exclusión.
 Benedicto XVI llegó del puerto de Kalkara al de Valeta. Hasta una hora fuera de programa se ha extendido este intenso momento vivido con los jóvenes entre cantos, lecturas, testimonios, la proclamación del Evangelio –que narra el encuentro de Jesús con el joven rico- y el discurso de Benedicto XVI.
A los jóvenes el Santo Padre propone el mismo encuentro que tuvo Pablo en la vía de Damasco con el Resucitado: «Pablo se vio totalmente embargado por este encuentro con el Señor y toda su vida cambió». Y es que «cada encuentro personal con Jesús es una experiencia sobrecogedora de amor».
Se trata del amor de Dios –de profundidad e intensidad inimaginable- «que aleja todo temor», «aunque nos llame la atención cuando hay algo en nuestra vida que le desagrada». Pero «Dios no rechaza a nadie, y la Iglesia tampoco», advirtió el Papa.
 «No tengáis miedo», llamó Benedicto XVI, consciente de que, en el seguimiento de Cristo, se encuentran ciertamente oposiciones al Evangelio, y que los jóvenes sufren la presión de ideas ajenas a lo que de verdad quiere el Señor. «Fiaos de Él», insistió.

El Papa a los jóvenes en Malta:
Queridos jóvenes de Malta, estoy muy feliz de estar entre vosotros, qué alegría poder encontraros en vuestra tierra. En este significativo aniversario damos gracias a Dios por haber enviado al Apóstol Pablo a estas islas, que son uno de los primeros lugares que recibieron la Buena Noticia de Nuestro Señor Jesucristo.
Os saludo a vosotros y os agradezco la confianza con la que me habéis hablado de los problemas que más os interesan. Aprecio vuestro deseo de buscar y encontrar la verdad, así como de saber lo que debéis hacer para alcanzar una vida plena.
 San Pablo tuvo de joven una experiencia que transformó para siempre su vida. Como sabéis, él fue antes enemigo de la Iglesia e hizo todo lo posible por destruirla. Mientras iba camino de Damasco con la intención de apresar a todo cristiano que allí encontrara, se le apareció el Señor en una visión. Una luz cegadora lo envolvió y oyó una voz que le decía: “¿Por qué me persigues?… Soy Jesús, a quien tú persigues” (Hch 9,4-5). Pablo se vio totalmente embargado por este encuentro con el Señor y toda su vida cambió. Se convirtió en un discípulo y llegó a ser un gran apóstol y misionero. Aquí, en Malta, tenéis un motivo particular para agradecer los esfuerzos misioneros de Pablo, que divulgó el Evangelio en el Mediterráneo.
 Cada encuentro personal con Jesús es una experiencia sobrecogedora de amor. Como el mismo Pablo admite, antes había “perseguido con saña a la Iglesia de Dios y la asolaba” (cf. Ga 1,13). Pero el odio y la rabia expresadas en esas palabras se desvanecieron completamente por el poder del amor de Cristo. Durante el resto de su vida, Pablo tuvo el deseo ardiente de llevar el anuncio de este amor hasta los confines de la tierra.
 Quizás alguno de vosotros me dirá que, a veces, san Pablo era severo en sus escritos. ¿Cómo se puede afirmar entonces que ha difundido un mensaje de amor? Mi respuesta es ésta: Dios ama a cada uno de nosotros con una profundidad y una intensidad que no podemos ni siquiera imaginar. Él nos conoce íntimamente, conoce cada una de nuestras capacidades y cada uno de nuestros errores. Puesto que nos ama tanto, desea purificarnos de nuestros errores y fortalecer nuestras virtudes de manera que podamos tener vida en abundancia. Aunque nos llame la atención cuando hay algo en nuestra vida que le desagrada, no nos rechaza, sino que nos pide cambiar y ser más perfectos. Esto es lo que le pidió a san Pablo en el camino de Damasco. Dios no rechaza a nadie, y la Iglesia tampoco rechaza a nadie. Más aún, en su gran amor, Dios nos reta a cada uno para que cambiemos y seamos mejores.
 San Juan nos dice que este amor perfecto aleja todo temor (cf. 1 Jn 4,18). Por eso os digo a todos vosotros: “No tengáis miedo”. Cuántas veces escuchamos estas palabras en las Escrituras. El ángel se las dice a María en la Anunciación, Jesús a Pedro, cuando lo llama a ser su discípulo, y el ángel a Pablo en vísperas de su naufragio. A los que deseáis seguir a Cristo, como esposos, padres, sacerdotes, religiosos o fieles laicos que llevan el mensaje del Evangelio al mundo, os digo: No tengáis miedo. Encontrareis ciertamente oposición al mensaje del Evangelio. La cultura de hoy, como cualquier cultura, promueve ideas y valores que contrastan en ocasiones con las que vivía y predicaba nuestro Señor Jesucristo. A veces, estas ideas son presentadas con un gran poder de persuasión, reforzadas por los medios y por las presiones sociales de grupos hostiles a la fe cristiana. Cuando se es joven e impresionable, es fácil sufrir el influjo de otros para que a aceptemos ideas y valores que sabemos que no son los que el Señor quiere de verdad para nosotros. Por eso, os repito: No tengáis miedo, sino alegraos del amor que os tiene; fiaos de él, responded a su invitación a ser sus discípulos, encontrad alimento y ayuda espiritual en los sacramentos de la Iglesia.
 Aquí, en Malta, vivís en una sociedad marcada por la fe y los valores cristianos. Deberíais estar orgullosos de que vuestro País defienda tanto al niño por nacer como la estabilidad de la vida familiar para una sociedad sana. En Malta y en Gozo, las familias saben valorar y cuidar de sus miembros ancianos y enfermos, y acogen a los hijos como un don de Dios. Otras naciones pueden aprender de vuestro ejemplo cristiano. En el contexto de la sociedad europea, los valores evangélicos están llegando a ser de nuevo una contracultura, como ocurría en tiempos de san Pablo.
 En este Año Sacerdotal, os pido que estéis abiertos a la posibilidad de que el Señor pueda llamar a algunos de vosotros a entregarse totalmente al servicio de su pueblo en el sacerdocio o en la vida consagrada. Vuestro País ha dado muchos y excelentes sacerdotes y religiosos a la Iglesia. Inspiraros en su ejemplo y reconoced la profunda alegría que proviene de dedicar la propia vida al anuncio del mensaje del amor de Dios por todos, sin excepción.
 Os he hablado ya de la necesidad de atender a los más jóvenes, a los ancianos y enfermos. Pero el cristiano está llamado a llevar el mensaje del Evangelio a todos. Dios ama a cada persona de este mundo, más aún, ama a cada persona de todas las épocas de la historia del mundo. En la muerte y resurrección de Jesús, que se hace presente cada vez que celebramos la Misa, Él ofrece a todos la vida en abundancia. Como cristianos, estamos llamados a manifestar el amor de Dios que incluye a todos. Por eso, hemos de socorrer al pobre, al débil, al marginado; tenemos que ocuparnos especialmente por los que pasan por momentos de dificultad, por los que padecen depresión o ansiedad; debemos atender a los discapacitados y hacer todo lo que esté en nuestra mano por promover su dignidad y calidad de vida; tendremos que prestar atención a las necesidades de los inmigrantes y de aquellos que buscan asilo en nuestra tierra; tenemos que tender una mano amiga a los creyentes y a los no creyentes. Esta es la noble vocación de amor y servicio que todos nosotros hemos recibido. Que esto os impulse a dedicar vuestra vida a seguir a Cristo. No tengáis miedo de ser amigos íntimos de Cristo.
 Queridos jóvenes, llegado el momento de dejaros, deseo manifestaros mi cercanía y el recuerdo constante en mis oraciones por vosotros, vuestros familiares y amigos. Saludad de mi parte a todos los jóvenes de Malta

-Dios nos ama como hijos


-Dios nos ama como hijos
 No estamos huérfanos, Dios nos ama entrañablemente:
La sorprendente revelación de Jesús fue decirnos que Dios es “el Padre”. 
En labios de Jesús, “Dios” o “Yahveh” ceden el paso al “Padre nuestro”. Jesús se dirige siempre a Dios con el término familiar de “Abba” (papá, termino cariñoso y familiar del niño a su papá querido), y hace partícipes a sus discípulos de su condición filial, de modo que también ellos puedan dirigirse a Dios con el mismo término de Abba.(papá).
El hombre de hoy es un huérfano, que se siente perdido en un universo sin límites; le han dicho que desciende del mono y que se dirige a la nada. Le han convencido de que la paternidad, dentro de la familia y en la sociedad, es el símbolo de la represión y, como consecuencia, le han llevado a “matar al padre” (concepto típico de cierta psicología). Con ello no ha logrado la libertad, sino la orfandad. Le han dicho que “Dios Padre” era el enemigo de su libertad. Muchos se lo han creído y se han dirigido a buscar un seno en las espiritualidades asiáticas, impersonales; otros buscan el seno de la madre tierra con el ecologismo y el naturismo. Pero siguen huérfanos. La muerte del padre se expresa en el miedo y desconfianza hacia el otro.
El mundo actual lo tiene todo; la ciencia y la técnica lo pueden todo, pero a nuestro mundo le falta un padre. Y, por ello, vivimos en un mundo frío, sin el calor de un padre. Descubrir a Dios como Padre es reconocer nuestra filiación divina y nuestra hermandad con todos los hijos de Dios. Es el único modo de romper la soledad y vencer el frío de la vida. Este es el deseo mismo de Jesús: “que todos los hombres te conozcan a ti, Padre” (Evangelio de San Juan, capitulo 17,3).
La Iglesia, como madre, enseña al hombre a hablar, diciendo: “Abba, Padre”. Y si el Espíritu Santo nos ayuda a experimentar que somos amados por Dios, que Dios es nuestro Padre, ello significa que no somos huérfanos, perdidos y abandonados a las fuerzas y condicionamientos de este mundo. Tenemos un origen fuera del espacio y del tiempo. Antes de ser concebidos bajo el corazón de nuestra madre hemos sido concebidos en el corazón de Dios Padre. Con el Hijo hemos sido engendrados en ·el seno del Padre” (como dice la Biblia), Con el Hijo, con su mismo Espíritu, osamos balbucir: “Abba, Padre”.
Quizás muchas veces nos sentiremos como el hijo pródigo, que despilfarra los bienes del padre con prostitutas, apacienta cerdos y desea nutrirse de algarrobas, (como explica la hermosa parábola del “hijo pródigo” que dijo Jesús), sin embargo sabemos que el Padre siempre nos espera, más aún nos sale al encuentro y nos abraza y perdona, nos viste, nos ofrece un banquete y hace fiesta por nuestra vuelta.
El Padre nuestro es como el resumen de la fe cristiana, que no se reduce al conocimiento de unas verdades, sino que lleva a la comunión con Dios, descubierto como

-El cielo no está cerrado



El cielo está abierto; llamados a la Vida
Me ha impresionado cómo empieza la primera Epístola de San Juan, que tiene un inicio que resume todo lo que son los Evangelios.
Dice san Juan: 1 Epístola de san Juan 1,1-10; 2, 1-17.
“Lo que existía desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que contemplamos y tocaron nuestras manos acerca de la Palabra de vida, -pues la Vida se manifestó, y nosotros la hemos visto y damos testimonio y os anunciamos la Vida eterna, que estaba vuelta hacia el Padre y que se nos manifestó- lo que hemos visto y oído, os lo anunciamos, para que también vosotros estéis en comunión con nosotros. Y nosotros estamos en comunión con el Padre y con su Hijo Jesucristo. Os escribimos esto para que nuestro gozo sea completo”.
O sea, que el resumen de todos los Evangelios y de la vida de Cristo es mostrarnos la Vida eterna, que hay otra vida después de ésta: el cielo que se abre. Dice san Juan que sus manos han tocado la Vida eterna, la han visto, la han oído. ¡La Vida eterna!

-los cristianos, los mas perseguidos hoy


El Papa denuncia que los cristianos son el grupo religioso más perseguido
Dedica el mensaje de la Jornada Mundial de la Paz a la libertad religiosa en el mundo
Benedicto XVI denunció que «los cristianos son actualmente el grupo religioso que sufre el mayor número de persecuciones a causa de su fe». Estas persecuciones incluyen violencia mortal en África, Asia y Oriente Medio, mientras que en algunos países occidentales consisten en «formas más sofisticadas de hostilidad» centradas en «renegar de la historia y de los símbolos religiosos» siguiendo estrategias «que fomentan a menudo el odio y el prejuicio», traicionando «el pluralismo y la laicidad de las instituciones».
El Vaticano hizo público ayer el extenso mensaje del Papa para la Jornada Mundial de la Paz del día primero de enero 2011, que este año lleva por título «La libertad religiosa, camino para la paz». El documento de veinte páginas comienza denunciando la trágica situación de Irak y, en concreto, el ataque contra la catedral de Bagdad que causó medio centenar de muertos el pasado 31 de octubre.
En la búsqueda de «una paz auténtica y estable para toda la familia humana», Benedicto XVI recuerda que «la familia fundada sobre el matrimonio, expresión de la unión intima y de la complementariedad entre un hombre y una mujer, se inserta en este contexto como la primera escuela de formación y crecimiento social, cultural, moral y espiritual de los hijos».
El reconocimiento estatal de la libertad para practicar la propia religión, cambiar a otra o no profesar ninguna es un derecho humano que no se puede pisotear. Al tiempo que pide plena libertad religiosa en todos los países, el Papa condena tanto «el fanatismo religioso» como el «fanatismo antirreligioso», pues ambos son contrarios a la libertad de la persona y tienden intrínsecamente a ser opresivos y violentos.

sábado, 15 de enero de 2011

-Los radicales se imponen en la universidad


Se «suspenden» las misas
Si no fuera un asunto muy grave, esta «suspensión cautelar» de las misas merecería un lugar destacado en una antología del absurdo jurídico
Día 14/01/2011
La decisión adoptada por la Universidad de Barcelona de suprimir la celebración de las misas en la capilla universitaria refleja una mentalidad sectaria y supone una arbitrariedad contraria al Estado de Derecho. Para colmo de males, los argumentos que pretenden justificar lo injustificable pueden ser calificados —sin exageración alguna— como un auténtico disparate. Resulta que los radicales boicotean los actos litúrgicos y coaccionan a los asistentes, de modo que las autoridades académicas ceden a las presiones con el pretexto de que no están en condiciones de garantizar la seguridad. El comunicado del decanato de Económicas afirma que se trata de preservar tanto la libertad religiosa como el derecho a la libre expresión, sin tener en cuenta que esta última no ampara actos de amenaza que se traducen a veces en una imposición con el objetivo de impedir las ceremonias. El caso es que los alborotadores consiguen salirse con la suya, lo que supone sin duda dar alas a los grupos que han convertido la Universidad española en un feudo de unos cuantos radicales, que impiden hablar a los políticos que no son de su agrado o simplemente a todos los que no comparten su ideología extremista.
En nombre de un sedicente progresismo, las actitudes laicistas se apoderan del espacio público en contra de la Constitución, de la tradición histórica y de la realidad social. Si no fuera un asunto muy grave, esta especie de «suspensión cautelar» de las misas merecería un lugar destacado en una antología del absurdo jurídico. Si existe voluntad para ello, es fácil poner en marcha las medidas necesarias para garantizar el derecho de profesores y estudiantes a practicar en libertad sus creencias religiosas. Las universidades gozan de autonomía constitucional, pero si las autoridades del «campus» son incapaces de cumplir sus obligaciones es evidente que las administraciones deben tomar cartas en el asunto. Rodríguez Zapatero ha creado un ambiente social que refuerza los planteamientos radicales en un terreno que —por fortuna— parecía superado como ámbito de conflicto gracias a la madurez de la sociedad española. Por desgracia, en las circunstancias actuales, parece que vuelven a producirse situaciones intolerables de coacción.
Editorial: ABC 14/01/2011

-La familia cristiana, esperanza para Europa


Kiko Argüello: La batalla sobre la familia es crucial
ALVARO DE JUANA / LA RAZON

 Kiko Argüello, el iniciador del Camino Neocatecumenal es uno de los principales impulsores del gran encuentro de oración por la familia cristiana que se celebrará el domingo en la plaza de Colón de Madrid.
– «La familia cristiana, esperanza para Europa». ¿Por qué este lema?
–Porque creemos firmemente que es así. Estamos asistiendo a una falta de relevo generacional por la falta de hijos. Según las estadísticas, necesitaríamos 2,11 hijos por familia y Europa tiene 1,5. Dicen los estudiosos que es una situación muy grave. Si la familia es cristiana está abierta a la vida, comprende que tener un hijo no es una cosa arbitraria, sino que es colaborar con Dios en crear un ser humano que vivirá eternamente. Es algo tan serio que el Vaticano II habló de paternidad responsable. Después del Concilio se ha creído por error que esto era tener uno o dos hijos, pero el Pontificio Consejo para la Familia de la Santa Sede ha dicho que no es así. Si los cristianos toman conciencia de su ser cristiano, la familia tendrá los hijos que Dios le dé y serán los futuros médicos, abogados, etc.
– ¿Cómo es la familia cristiana?
– Los cristianos tenemos dentro vida eterna. Por el pecado original, el hombre está como condenado a ofrecerse todo a sí mismo. Sin embargo, dice San Pablo que «Cristo murió por todos los hombres, para que no vivan más para sí mismos». Todo hombre sabe que amar, que ofrecerse al mundo para salvar a los hombres es la verdad y Dios ha enviado a su Hijo para salvarnos de este egoísmo radical. El hombre cristiano es el que no vive más para sí mismo, porque ha recibido de Dios la victoria sobre la muerte y puede amar al enemigo.
– ¿Por qué es importante transmitir la fe a los hijos y cómo lo hace el Camino Neocatecumenal?
–La Iglesia ha dicho que transmitir la fe a las siguientes generaciones es de vida o de muerte. Es muy importante que la familia, padres e hijos, se reúnan y hablen. En el Camino hacemos una celebración en la que los domingos se reúne la familia en torno a una mesa con mantel, una Biblia, una vela en el centro y una cruz. Se lee la Escritura y el padre pregunta a los hijos: «¿esta palabra qué le dice a tu vida?» La palabra viene a ser luz a la historia de cada hijo y al final aparecen todos los problemas que tienen. El padre o la madre entonces les dan una palabra y todos rezan el Padre Nuestro y se dan la paz. Para terminar, cada uno de los hijos recibe la bendición de los padres.
– ¿Cuál es la situación de la familia en Europa?
–Se ha ido destruyendo poco a poco. Por ejemplo, Holanda está llena de matrimonios homosexuales, es como una moda. En Francia el 50% de la población ya no está bautizada. Juan Pablo II habló de la apostasía de Europa. Se ha caído en el error de pensar que todos tienen fe, pero no es así. Es muy importante recuperar la fe, abrir en las parroquias una iniciación cristiana donde dialogar con la gente. Es urgente la nueva evangelización.
– En el encuentro participarán obispos europeos…
– Organizar esto humanamente es difícil, pero lo hacemos por amor a Jesucristo y a la familia. Nos sorprende que los obispos, que están con muchos problemas en sus diócesis, sean capaces de ir a Madrid. Tenemos un único espíritu en la Iglesia y estamos todos de acuerdo en que la batalla sobre la familia es crucial.
–Usted cantará «María, paloma incorrupta». ¿De qué trata?
– El cardenal Rouco me invitó a hacer un disco sobre la Virgen con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud. En el disco aparece este canto nuevo. Tomé un texto de San Romano el Meloda, un artista sirio. En Bizancio se reunía con los cristianos en una celebración y les enseñaba arte con los iconos, música y después hacía una homilía dialogada. Terminaba con un himno que tenía estribillos para el pueblo, llamados «kontákia». Uno de ellos dice que la Virgen es la «única paloma incorrupta», el «refugio de las almas débiles» y la «filacteria de la perfecta castidad». Le he puesto música y como es un canto nuevo se lo dedicamos a la familia.
CAMINEO.INFO.

- A Zapatero no le gusta ni Gaudi ni el Papa

 “Gaudí bien vale una misa”

(Juan Rubio- Director de Vida Nueva)
 Zapatero no quiere ir a misa. Parece un adolescente díscolo que teme a la mofa de su pandilla después de misa de doce. Tiene este presidente ciertos episodios de adolescente que explican su perfil, y el religioso es uno de ellos. No le molesta ponerse la kipá o el turbante. Tampoco liderar la Alianza de Civilizaciones o leer un texto de la Escritura delante de Obama. Pero a misa, “nada de nada, monada”. Prefiere despedir al Papa en el aeropuerto, como hizo Cameron en Inglaterra (no sabe ZP que el MP británico tuvo que ir antes al funeral de su padre). En el Prat chupará cámara, teniendo la última palabra, y hará una profesión de fe laicista tal que no se le suban los colores. Enrique IV, viendo peligrar el trono de Francia por la presión de la Liga Católica, decidió convertirse al catolicismo pronunciando la ya famosa frase: “París bien vale una misa”. Ni eso parece interesarle a un presidente temeroso de la calle y que se ha empecinado en una espiral de laicismo agresivo que solamente son capaces de frenar algunos políticos clarividentes –que los hay– en las filas del partido gobernante. Otra cosa es que les hagan caso. Lo suyo es de pura adolescencia. Se los carga antes que escucharlos.

-El Gobierno reconoce querer imponer una moral estatal


El Abogado del Estado reconoce que Educación para la Ciudadanía es una moral estatal
Teresa García-Noblejas

En el marco del recurso de unos padres objetores a Educación para la Ciudadanía ante el Tribunal Constitucional, el Abogado del Estado ha defendido, como exige su papel, las polémicas asignaturas.

Entre los argumentos esgrimidos por el Abogado del Estado en sus alegaciones ante el Tribunal, se encuentran los siguientes:

· «La concepción filosófica que presupone la democracia es el relativismo».

· «Hoy la objeción recae sobre Educación para la Ciudadanía. Mañana podría objetarse la asignatura Ciencias de la Naturaleza, porque se explica en ella la teoría de la evolución, incompatible con la letra del relato bíblico de la Creación».

· «El principio pluralista de un Estado democrático exige ciudadanos capaces de juicios morales autónomos».
 . De la Constitución no se desprende que «la educación o las virtudes cívicas deba considerarse monopolio de los padres».

 «No podíamos esperar», afirma Leonor Tamayo, responsable del Área Internacional de Profesionales por la Ética, «que la propia Abogacía del Estado reconociera por escrito y ante el Tribunal Constitucional, que Educación para la Ciudadanía es una moral de Estado destinada a formar a los alumnos en relativismo ético. Nos sorprende que equipare Educación para la Ciudadanía a disciplinas académicas que transmiten conocimientos; Educación para la Ciudadanía enseña a los alumnos, desde los 10 a los 17 años, que no hay bien ni mal, que todo es relativo en el terreno ético y que cada uno tiene su propia moral. Otras asignaturas muestran conocimientos de manera objetiva pero no pretenden que los menores cambien sus valores o se adhieran existencialmente a ellos».
 Tamayo ha anunciado que Profesionales por la Ética va a traducir las alegaciones del Abogado del Estado al francés y al inglés para exponerlos en foros internacionales como ejemplo del carácter adoctrinador de Educación para la Ciudadanía. «Las afirmaciones del Abogado del Estado» asegura, «respaldan, por ejemplo, la demanda de 321 españoles a los que estamos asesorando en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo».
 Y es que tanto la Declaración Universal de Derechos Humanos como el Tratado de Lisboa y la propia Constitución Española confirman que los poderes públicos garantizarán que los padres puedan educar a sus hijos según sus convicciones morales y religiosas».
Profesionales por la Ética ha promovido la demanda de 321 objetores a Educación para la Ciudadanía ante el Tribunal de Estrasburgo y ha denunciado el carácter adoctrinador de estas asignaturas en diversas reuniones de la Organización para la Cooperación y la Seguridad en Europa y en el Parlamento Europeo.
CAMINEO.INFO.-